domingo, 20 de febrero de 2011

La vida es un camino empedrado y no como decía Extremoduro de horas, minutos y segundos, sino muchas veces está lleno de otras cosas, decepciones, alegrías, y sobre todo de problemas y lucha, si exactamente eso de problemas y lucha, no es nada nuevo seguro que todos lo sabéis.

Hoy día tal y como está la economía tenemos un serio problema, no es que este todo bien o todo tan mal, ese no es el caso, nos hemos parado a pensar, ¿cuanta gente no está satisfecha consigo misma porque no se siente realizada?, ¿Cuantas familias debes explicar a sus hijos que no pueden comer ni una golosina, porque no hay dinero?, ¿Somos conscientes de la cantidad de familias que se destruyen por no tener dinero?, ¿La gente que piensa en dejar este mundo por no sentirse realizado?.

No somos conscientes pero nosotros estamos en crisis pero hay mucha gente que lleva muchos años en crisis, y ahora su penuria se ha acrecentado, sobre todo en países del tercer mundo, si esos países africanos o ya no africanos sino sudamericanos, indonesios, o asiáticos, e incluso europeos, si somos un país muy rico, tenemos de todo, pero que pasa con esa gente que vive explotada continuamente y que vive junto a nosotros y nosotros no somos capaces de verlo.

Salimos cada fin de semana, gastamos dinero en caprichos en cosas insignificantes que después no utilizamos o las dejamos tiradas en una esquina, protestamos por la subida de luz, subida de la luz que mucha gente no puede pagar en nuestro país, pero no vemos que hay mucha gente en otras partes del mundo que no pueden permitirse el lujo de tener electricidad, alguna pensamos en esa gente, nos comemos todos los caprichos, despilfarramos la comida y sobre todo tiramos comida que vale un sueldo de gente del tercer mundo como si tiráramos un pañuelo de papel.

Tenemos grandes avances informáticos, avances que tardaran años en llegar a otros países, somos unos privilegiados, no sabemos la gran suerte que tenemos.

A veces miro a mi alrededor y veo todo lo que tengo, todo lo que poseo y pienso de verdad necesito todo esto, no sé si lo haréis los demás, pero a mí me resulta muchas veces un poco imposible mirar a mi alrededor y no ver todo aquello que me sobra, todo aquello que no usare más que una vez, todo lo que decía mas arriba y que si suena hipócrita porque ahora mismo, estoy usando una de esas tantas cosas que digo, pero somos tan cómodos que no sabemos vivir sin nuestras ventajas.

No sé si os lo habéis planteando pero no os gustaría, al menso una de las cosas que tenéis que alguien desconocido, alguna persona de algún punto del planeta que no conocéis, que no tiene las mismas ventajas que tu, al menso una vez al año o dos mejor pudiera tener algo vuestro, pueda disfrutar con aquello que nosotros ya no podemos, yo a veces lo pienso y la verdad seria un orgullo y una satisfacción al menos en mi caso.

Algunos pensareis que me ha dado un ataque de solidaridad, que no son más que palabras, la verdad lleva dios escribir esto en mi mente, pero no pretendo mover montañas y soy muy realista y sé que no estaremos todo el planeta juntos de la mano y ayudándonos, es imposible, es más una utopía, o ¿no? ya sabemos que en oriente la población está despertando y pide algo mejor, porque en definitiva todos nos merecemos algo mejor.

Si con esto he conseguido que penséis en ello 5 minutos la verdad con esto ya estoy conforme.

Cuando el dinero habla, la verdad calla. Proverbio chino

1 comentario:

Amybro dijo...

Creo que no sólo es ver lo que tenemos y casi nunca utilizamos. El problema es ver las cosas que ansiamos, cosas que realmente no sabemos si nos harán alcanzar la felicidad, pero nos empecinamos en conseguirlo... Y al tenerlas volverá a ser una de las cosas que no utilizamos nunca.
En la vida se han perdido los valores. Nos da igual lo que pase a nuestro alrededor, el otro día una amiga se quejaba amargamente de cómo la gente había ignorado a una pobre anciana que se había caído en la calle un día lluvioso.
El mundo cada vez es más materialista, queremos más, más y más. Cueste lo que cueste. Que un producto es más barato en el chino: ¡lo compro! Nadie se para a pensar porqué ese producto es tan barato: la materia prima, la contaminación, los derechos de los niños y de los esclavos...